Esta riquísima tarta sorprende por su original presentación en capas de los colores de los tres chocolates que la componen.
Staff de Recetas con Gusto
Lo primero que vamos a hacer es la base de la tarta, para lo que utilizaremos las galletas María y la mantequilla. Picaremos muy bien las galletas, ayudados por una trituradora si es necesario, hasta que queden en polvo. Derretimos la mantequilla en un bol en el microondas y se la agregamos a las galletas mezclándolo bien para formar una pasta.
Vamos a utilizar un molde redondo de unos 23 centímetros desmontable, y cubriremos el fondo con la pasta de galleta y mantequilla hasta que quede uniformemente repartido y con la superficie bien lisa. Lo metemos en la nevera 15 minutos para que endurezca.
Mientras tanto, en un bol grande mezclamos el litro de nata con los 500ml de leche, y ponemos medio litro de esa mezcla en un cazo. Utilizaremos medio litro para cada capa de la tarta.
Comenzaremos con el chocolate negro, aunque el orden de los colores lo dejamos a vuestra elección. Ponemos a calentar el cazo con el medio litro de leche y nata y le añadimos el chocolate negro con 75 gramos de azúcar y un sobre de cuajada. Lo removemos despacito durante 7-8 minutos a fuego medio y deberá quedarmos una mezcla homogénea. Sacamos el molde de la nevera y vertemos nuestro preparado de chocolate negro sobre la galleta. Lo introducimos de nuevo en la nevera hasta que la siguiente capa esté lista.
Vamos a repetir el proceso anterior para el chocolate con leche, pero esta vez añadiremos sólo 50 gramos de azúcar, en vez de los 75 que llevaba el chocolate negro porque es más amargo. Medio litro de leche con nata, el chocolate con leche, el azúcar y la cuajada. Pasados los 7 u 8 minutos de cocción volvemos a sacar el molde de la nevera y echamos la mezcla sobre la capa de chocolate negro. Vuelta a la nevera hasta que esté la última capa preparada.
Nuevamente debemos seguir los mismos pasos: el medio litro de leche y nata restante, el chocolate blanco y el sobre de cuajada. Esta vez no pondremos azúcar. Tras los 7 u 8 minutos de cocción, volvemos a sacar el molde de la nevera y rellenamos con la útima mezcla de chocolate blanco. Lo meteremos en la nevera hasta el día siguiente y la podremos decorar con lo que más nos guste, como fideos de chocolate, perlitas de azúcar, frutos secos...