De origen americano, esta tarta de zanahoria con frosting de crema de queso endulzará nuestros desayunos y meriendas.
Staff de Recetas con Gusto
Primero pelaremos las zanahorias y las pondremos a cocer en una olla mediana con agua suficiente durante quince minutos.
Mientras se hacen las zanahorias, mezclaremos en un bol estos ingredientes secos: harina, levadura, bicarbonato, canela y sal. Lo reservamos.
En otro bol mezclaremos el aceite con el azúcar. Añadiremos los huevos uno a uno mientras batimos con la batidora a velocidad media.
Retiramos las zanahorias del agua y las machacamos con un tenedor sobre la mezcla anterior.
Incorporamos los ingredientes secos que habíamos mezclado previamente volviendo a batir con la batidora a velocidad media hasta que quede una masa homogénea.
Cubrimos un molde redondo grande con papel de horno, para que no se nos pegue la tarta, y vertemos la mezcla en su interior.
Con el horno precalentado a 180 grados, metemos el molde a media altura y horneamos la tarta durante una hora a dicha temperatura.
Mientras se hornea la tarta vamos a preparar el frosting de crema de queso. Volveremos a utilizar un bol y la batidora.
Calentamos la mantequilla en el microondas durante unos segundos hasta que se derrita. Le añadimos el queso Philadelphia y batimos con la batidora hasta que quede bien mezclado. Poco a poco le incorporamos el azúcar glas hasta que tenga la consistencia que más nos guste.
Cuando la tarta esté lista la sacamos del horno y dejamos enfriar a temperatura ambiente. Con la ayuda de un cuchillo ancho o de una espátula de cocina untaremos el frosting de crema de queso por toda la superficie externa de la tarta. La conservaremos en la nevera.