Estupendo plato para sorprender a nuestros invitados por su envoltura hojaldrada y el relleno de champiñones, cebolla y bacon.
Staff de Recetas con Gusto
Ponemos un chorrito de aceite de oliva a calentar en una sartén grande a fuego alto.
Con un cuchillo, limpiamos la grasa externa del solomillo de cerdo. Le ponemos sal al gusto y lo ponemos en la sartén para sellarlo, esto es que se tueste por todos lados sin llegar a hacerse por dentro, sólo por fuera. Lo reservamos.
Picamos la cebolla en trocitos pequeños y la ponemos a pochar en la misma sartén con el aceite que sobró de sellar el solomillo.
Picamos muy bien los champiñones, podemos incluso triturarlos, y los añadimos a la sartén con la cebolla pochada. Lo dejamos pochar todo unos 20 minutos.
Ahora ponemos la masa de hojaldre extendida sobre una superficie plana. sobre ella pondremos una capa de esta pasta de champiñones y cebolla de menos de un centímetro de grosor.
Sobre la pasta de champiñones y cebolla extenderemos las cinco lonchas de bacon, formando una tercera capa sobre el hojaldre.
Por último ponemos en el centro el solomillo de cerdo sellado. Ahora con mucho cuidado enrollaremos todo formando un cilindro que tendrá una capa externa de masa de hojaldre, luego champiñones con cebolla, después bacon y en el centro el solomillo. Cerramos bien los extremos de la masa de hojaldre para que no se nos pueda escapar relleno.
Batimos un huevo y con la ayuda de un pincel de cocina, si no tenemos usaremos un tenedor, pintaremos la masa de hojaldre con el huevo. Esto hará que el hojaldre brille cuando esté hecho.
Precalentamos el horno a 180 grados, ponemos el solomillo envuelto sobre una fuente de horno y lo metemos a calentar durante 35 minutos. Es importante no pasarse para que el solomillo no quede duro. Veremos como crece y se tuesta el hojaldre. Estará listo para servir en cuanto haya terminado de hacerse.